Desde el momento en el que se anunció que, tras “The amazing Spider-Man”, James Horner no repetiría como el compositor de “The amazing Spider-Man 2: El poder de Electro”, enseguida pensé que Hollywood volvía a las andadas. Los gerifaltes de los grandes estudios quieren los mismos sonidos de siempre en sus películas, y da la impresión de que determinados realizadores… también (en este caso, Marc Webb). Aunque en principio el sustituto del autor del score de “Titanic” era una de las mejores elecciones posibles (Hans Zimmer), no me gustó nada que varios de sus habituales colaboradores también fueran a firmar la banda sonora de esta secuela (al respecto, cabe mencionar los nombres de, entre otros, Pharrell Williams y Johnny Marr).
¿Cuál es el resultado? Una irregular obra que contiene momentos buenos con otros realmente prescindibles. Entre los primeros destacaría el nuevo tema de Spider-Man, que por suerte posee bastante fuerza y que se asemeja bastante al de Horner. Además, se emplea bastante bien en las escenas dramáticas, usándose para ello adecuados arreglos (tal y como se puede comprobar en la emotiva conversación que mantienen Peter y su tía May). Sin embargo, las piezas que describen a Max Dillon/Electro son horribles. Antes de que dicho personaje se convierta en un villano, la música resulta demasiado sosa y fuera de lugar. Cuando ya se transforma en el antagonista del trepamuros, chirriantes sonidos electrónicos se adueñan de la partitura (incluyendo aquí unos innecesarios elementos vocales). Menos mal que, sin ser brillante, al menos el de Harry Osborn está más cuidado.
a la mierda todo jaja el de danny elfman los supera a todos!
incluyendo a Hans Zimmer que aunque es un master en la composicion esta vez si la cajeteo bien gacho, pues el tema de the amazing spiderman 2 parece la entrada es un noticiero jaja, por otro lado me encanto el tema de electro! wow! paranoia<3
Vaya, pues a mí el de Electro fue el que precisamente menos me gustó. No obstante, hay mucha gente a la que le encanta. El tema de Elfman tiene más fuerza, pero los de Horner y Zimmer digamos que son más melódicos. ¡Un saludo y gracias por tu comentario!