Está claro que Chris Hemsworth no sólo quiere ser recordado por haber dado vida a Thor, el célebre superhéroe de Marvel. Y es que el actor ha adquirido los derechos cinematográficos de “I’ll never get out of this world alive”, un libro de Steve Earl que en España se publicó con el título de “No saldré vivo de este mundo”. Su argumento se puede leer en la página web de El Aleph Editores:
Doc Ebersole vive con el fantasma de Hank Williams. Literalmente. Y no solo porque fue uno de los últimos en verlo vivo, ni tampoco porque se rumorea que fue él quien dio a Hank Williams la dosis final de morfina que le mató. En 1963, diez años después de la muerte de Hank, el propio Doc está destrozado por su adicción a la morfina. Ha perdido su licencia para practicar medicina y su adicción no es tan fácil de financiar como antes. Por este motivo, vive en un apartamento de alquiler en un barrio marginal de San Antonio, en Tejas, practicando abortos y remendando heridas de cuchillo o de bala. Pero cuando Graciela, una joven inmigrante mexicana, aparece por el barrio buscando los servicios de Doc, empiezan a suceder cosas milagrosas. Graciela tiene una herida en la muñeca que no se cura jamás, pero en cambio puede curar a otros tan solo tocándolos con la mano. Toda la gente a quien conoce se transforma para mejor, excepto, quizás, el fantasma de Hank Williams; a él no le gusta nada que las cosas le vayan bien a Doc.