¿Qué consola merece la pena comprar?

La nueva generación de consolas ya está aquí. Todo empezó con Wii U, cuyas ventas no han sido todo lo elevadas que a Nintendo le gustaría (sobre todo después del increíble éxito que consiguieron con Wii). Desde hace unas semanas están disponibles en las tiendas tanto la PlayStation 4 como la Xbox One. Ambas han funcionado muy bien, rebasando las dos millones de unidades vendidas en un espacio de tiempo ciertamente breve. Ahora bien, ¿de verdad merece la pena comprar en estos momentos alguna de estas máquinas?
Bajo mi punto de vista, no. Si ya tienes una PlayStation 3 o una Xbox 360, has de saber que aún se lanzarán unos cuantos títulos para ambas consolas. Y no sólo es eso, sino que disponen de un catálogo tan amplio que todavía puedes descubrir juegos que llevan meses en el mercado y que, por una u otra razón, no pudiste adquirir en su día. 
Otro dato a considerar es el precio de las consolas de nueva generación. En los tiempos que corren, cuando nos hallamos en medio de una crisis económica que no parece tener fin, me parece excesivo gastarse entre 400 y 500 euros para comprarse una máquina de este tipo. Si dispones de ese dinero y vives de forma desahogada, adelante, al menos contribuirás a que el mercado se mueva. Pero, si no es así (que es lo que le sucede a la mayoría de los mortales), será mejor aguardar.
Esto conlleva otra ventaja. Y es que, al cabo de unos años, las nuevas consolas sufren importantes modificaciones. A Sony, Microsoft y Nintendo les cuesta menos fabricarlas, sus componentes se hacen más pequeños y cambian el diseño de las mismas. No es nada nuevo, pues es algo que también hemos visto en la pasada generación. Por lo tanto, cuando ello suceda no sólo tendrás una máquina más pequeña y con mejores prestaciones (un mayor disco duro, por ejemplo), sino que también te habrás ahorrado bastantes euros. Y eso por no mencionar el hecho de que su catálogo de juegos se habrá ampliado, apareciendo ya las primeras rebajas de varios de sus títulos. 
Mi consejo, pues, es esperar, especialmente en el caso de que ya poseas una PlayStation 3 o una Xbox 360. Éstas aún no han muerto y nos brindarán no pocas alegrías en los meses venideros. Paciencia, pues, estimados lectores...

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