Crítica de la película "Roma"

Crítica de la película "Roma"

Si hace unos años nos dicen que una plataforma online, en este caso Netflix, iba a arrasar en la temporada de premios, creo que pocos nos lo creeríamos. Eso es lo que precisamente ha sucedido con "Roma", el último trabajo del mexicano Alfonso Cuarón.

Y es que buena parte de la industria del Séptimo Arte ve con malos ojos que las películas se estrenen en este tipo de servicios, ya que consideran que se pierde la esencia de lo que es el cine. Otros, sin embargo, piensan que hay que adaptarse a los nuevos tiempos y evitar quedarse sin espectadores que, de todos modos, rara vez acuden a las salas a ver un largometraje.

Mi opinión es intermedia. Considero que no hay nada como disfrutar de un filme en la pantalla grande y sentir las risas o penas del resto del público. De hecho, es una lástima que títulos como "Roma" no se puedan disfrutar plenamente en este formato. Al mismo tiempo, considero que es un error negar que hay gente a la que le gusta consumir contenido audiovisual en sus hogares, bien sea delante de un televisor o de la pantalla de su ordenador, tableta o teléfono móvil.

"Roma", ¿una obra de arte?

Bajo mi punto de vista, "Roma" es una película que se regodea en exceso en las formas. Tal es así que a muchos espectadores les parecerá una obra lenta, aburrida y demasiado larga. No voy a ser yo quien les contradiga, ya que, en efecto, eso es lo que transmite buena parte de su metraje.

Y es que a ratos esta obra resulta exageradamente contemplativa, algo que se percibe de forma notoria cuando alarga sin necesidad la duración de determinadas escenas. Con ello se pretende transmitir un realismo que también vuelve a la cinta un tanto pretenciosa.

Lo peor de todo es que no es sencillo conectar con los personajes. El guión nos da pistas sobre sus problemas diarios, pero tampoco ahonda demasiado en ellos. Entiendo que lo que se quiere reflejar es la importancia de lo cotidiano, pero a veces da la impresión de que existe una barrera entre ellos y el público.

Donde no se le puede poner ningún pero a "Roma" es en sus apartados técnicos. La puesta en escena de Alfonso Cuarón sólo se puede tildar de fascinante, con planos muy cuidados y una fotografía deslumbrante (nunca mejor dicho).

Crítica de la película "Roma"

Si tuviera que seleccionar algunos pasajes de la película, sin duda alguna me quedaría con tres que observamos durante el tercio final de la misma: la manifestación estudiantil (con un uso increíble de los extras), el nacimiento del bebé y el suceso en la playa.

Los intérpretes realizan una gran labor, sobre todo porque saben comportarse con naturalidad delante de la rebuscada cámara del realizador.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Subir

Utilizamos cookies para asegurar que damos la mejor experiencia al usuario en nuestra web. Leer más