A estas alturas, me temo que los rivales de Marvel Studios lo tendrán difícil para competir con esta división de Disney en lo que a películas de superhéroes se refiere. Una prueba de ello es
, nueva franquicia que no depende tanto de otras sagas de la compañía y que, sin embargo, ha conseguido llamar la atención del público. ¿Se habrá convertido Marvel en una suerte de Pixar? ¿Bastará su nombre como reclamo para los millones de personas que habitualmente acuden a las salas de cine? Da la impresión de que así es.
El filme
podría definirse como una comedia de ciencia-ficción. Al contrario que otros largometrajes de similares características, los mismos en los que los apartados dramáticos llevan la voz cantante y vienen acompañados por breves contenidos humorísticos, aquí sucede todo lo contrario. Lo ligero se impone a lo serio, encontrándonos con
un recomendable divertimento que genera no pocas sonrisas durante su visionado. No obstante (y, por supuesto, hablo de una apreciación personal), he de reconocer que me resultaron más interesantes los apuntes severos de la historia (una prueba de ello es su
fantástico prólogo, que me dejó con un nudo en la garganta).
«Guardianes de la Galaxia» se sustenta en una
historia muy sencilla en la que un variopinto grupo de seres de distintos mundos ha de unir sus fuerzas para evitar que un poderoso orbe caiga en malas manos.
La presentación de personajes es verdaderamente ágil, conociendo parte de su pasado según avanza el metraje de la cinta. Sin embargo, ésta presenta un grave problema: hay demasiados. En efecto,
son tantas las criaturas galácticas que se pasean por la pantalla que, por desgracia,
el espectador se queda con la sensación de que la introducción de varias de ellas se hace completamente innecesaria.

Sobre las apariciones de Peter Quill/Star-Lord, Gamora, Drax, Groot y Rocket no hay nada que decir y los tiempos están bien medidos. Sin embargo, no sucede lo mismo con otros personajes. Ronan (
Lee Pace), el principal villano del relato, queda desdibujado y en ningún momento llega a amedrentarnos. De hecho, apenas posee carisma y sus interacciones con Thanos se vuelven fallidas. Incluso Nébula (
Karen Gillan) lo supera en interés. Por otro lado, la presencia de Korath (
Djimon Hounsou), Corpsman Dey (
John C. Reilly), Nova Prime (
Glenn Close) y, sobre todo, El Coleccionista (
Benicio Del Toro) resulta anecdótica. Curiosamente, Yondu (
Michael Rooker) adquiere un sorprendente protagonismo. Respecto al reparto, me alegro de que últimamente a
Chris Pratt le esté yendo tan bien en la gran pantalla. Conocí a este actor gracias a la serie «Everwood» y resulta grato comprobar que está en el mejor momento de su carrera.
Zoë Saldana transmite a la perfección la bravura de Gamora, mientras que me ha sorprendido gratamente el trabajo de
Dave Bautista como Drax (en un papel nada sencillo). A pesar de no estar acostumbrado a trabajar en superproducciones de Hollywood, el director
James Gunn se desenvuelve con mucha corrección en las escenas de acción y en las dramáticas (lo que no me sorprende es que haga lo propio en las cómicas). Del apartado visual de la cinta, destacar la llamativa recreación que se hace del planeta Xandar.
En resumen…
«Guardianes de la Galaxia» es una estupenda película de evasión, pero no me parece mejor que otras que se han estrenado a lo largo de los últimos años. Cuestión de gustos…